No me cuentes, tus razones para la guerra,

no me digas sólo las palabras de tu verdad,

 deja el miedo de las respuestas,

 junto al dolor de las preguntas, descansar;

y cuando vuelvas, vacío de certezas,

trae en tu mirada la semilla de la paz,

dejaremos entonces que el viento y la tierra,

entonen la canción, que nos unirá.



                                                                   Iñaki.




Comentarios

  1. Comparto el mensaje del poema.Las certezas fabricadas por los hombres impiden el diálogo y la tolerancia.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Una belleza el mensaje y el modo de expresarlo.

    Un gusto conocer tu blog.

    Saludos :)

    ResponderEliminar
  3. Por favor perdóname IÑAKI! no te cuento las razones de haber tardado tanto en leer esta preciosidad y todos los maravillosos regalos que nos haces llegar con tus palabras porque además no importan, solo que te llegue mi admiración, mi cariño, mi gratitud y mis deseos unidos a los tuyos de que el mundo salga de esta espiral enloquecida de muerte y sin razón... hace mucho que se veía venir lo que tristemente sufrimos ahora los occidentales.. porque en el resto del mundo hace mucho qu viven en el infierno .. la linea de lo razonable se ha sobre pasado hace mucho... el fanatismo, unido a la miseria y la desaparición = locura sanguinaria... de los vientos que hemos sembrado recogemos estas tempestades ...

    Aun así, confío, deseo confiar que un día el hombre dejará de ser malo para el hombre porque todos estamos en el mismo barco .. si se hunde para unos, se hunde para todos... ¡¡obligatorio flotar TODOS!! ;)


    Mucho muchos beso y mil gracias mi querido hombre TIERRA!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares