Y después de besar cada palabra, que se posa en tus labios cuando hablas... respiro... el perfume del aire donde habitas. Descendiendo hacia el suelo de nubes, donde la vida... se hace sueño que me acerca... a la luna de tu cuerpo, y a las estrellas que acarician... con tus dedos. Y así soñando... van mis labios soplando las cenizas, que hacen de la noche ... un ascua nuevo. Y el frenético despertar nos trae el fuego, donde arden... los labios, la piel, los besos, el sueño de la noche... y nuestros cuerpos; encendidos por la luz que se hace llama, cuando tu amas. Y en los rescoldos del encuentro, busco las brasas, para bañarlas en la ternura, de las palabras, que todo lo dicen... que todo lo abarcan... que son la esencia de lo que siento, cuando me abrazas; amor mío....yo te quiero... por encima de los días y de todas las palabras. Izara.