Hubo un tiempo, donde un blog era un poco como la ventana, donde los sentimientos escritos se asomaban. Luego el cambio a otras maneras de compartir, lo fue dejando como esos pueblos abandonados donde se acuesta la mirada de otros tiempos de la vida. Pero no cambia el recuerdo de las voces, que un día fueron y aún son, el antídoto contra el ruido o el silencio que oprimen los instantes, donde la voz calla por no saber cantar al nuevo día. Por eso aprovechando la nueva vuelta al sol, que celebramos el día 2, comparto el escrito que publiqué en las redes, donde de ves en cuando, aún intentamos decir algo. Cuando el río de las palabras baja seco; y la fuente donde se nacen se desplaza, buscando el manantial de sueños locos, donde guardan las almas, su esperanza. En ese tiempo, sin horas, ni retorno, donde la mañana es una utopía sin entraña; y la tarde se acuesta en grises tonos; mientras el futuro busca voz entre las ramas, el viento sopla de bochorno; y los trinos cantan s...
"Caminante, son tus huellas
ResponderEliminarel camino, y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de pisar.
Caminante, no hay camino,
sino estelas en la mar".
A. Machado.
Tu precioso amanecer es como ese "camino blanco" machadiano, sin más horizonte que aquel que queramos mirar. Caminos que se hacen carne cuando su cálida piel es recorrida por el abecedario de los besos. Es entonces cuando comienzan a palpitar.
Bellísima tu composición, Izara.
Un beso para hacer camino...
"Caminante, son tus huellas
ResponderEliminarel camino, y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de pisar.
Caminante, no hay camino,
sino estelas en la mar".
A. Machado.
Tu precioso amanecer es como ese "camino blanco" machadiano, sin más horizonte que aquel que queramos mirar. Caminos que se hacen carne cuando su cálida piel es recorrida por el abecedario de los besos. Es entonces cuando comienzan a palpitar.
Bellísima tu composición, Izara.
Un beso para hacer camino...
Un poema hermoso y cercano, lleno de ternura y sentimiento.
ResponderEliminarUn nuevo año, un nuevo sendero que transitar...
Sus luces y sombras dependerán de nuestros pasos.
Un saludo.
Cada amanecer es una bendición aunque para el tiempo sea una herida.
ResponderEliminarPrecioso tu amaneces, Izara
UN abrazo
Cada amanecer es un regalo que debemos celebrar, una camino siempre nuevo y sin edades ¡qué metáfora tan preciosa!
ResponderEliminardos abrazos :)
Un nuevo año repleto de amaneceres para llenarlos de ilusiones, cometidos...
ResponderEliminarAprovechemos intensamente todo ese tiempo.
Un saludo
Cada año que comienza es un amanecer a estrenar lleno de 365 amaneceres.
ResponderEliminarCada día que comienza es un sendero por el que caminamos, por el que vamos dejando esas huellas que a veces, con suerte, se llena de besos.
Siempre escribes como acariciando y eso es muuuy agradable, hasta la música que se escucha en tu casa acaricia. Así da gusto caminar por tu sendero;-)
Un beso grande IZARA, que tu sendero te lleve a donde deseas.
Feliz noche
Dichosos, los que hemos podido,pasar esa pagina del tiempo, y comenzar una nueva, llena de blancos , para ser escritos con tinta de vivencias y sueños
ResponderEliminarPRECIOSO POEMA!!!
Besotesss y linda semana!
Nada tan excitante como el inicio de un nuevo camino en el que todo está por descubrir.
ResponderEliminarPreciosos versos.
Un fuerte abrazo.
"Un camino sin edad..." donde importe cada nuevo paso... y mirando hacia adelante con nuestra verdad.
ResponderEliminarFeliz año Izara, y gracias por estos poemas tan bellos y llenos de vida.
Un abrazo
Hermoso! Esperanzador!
ResponderEliminarAmanece y eso es lo importante, un nuevo sendero por el que vamos a ir dejando nuestras huellas…sin edad, para ir llenando cada día una página nueva de nuestra vida al calor de nuestras vivencias…
ResponderEliminarUn saludo