la hermosa vibración de los animales, nos adelanta en el agradecimiento. Aunque me gustan poco estos días y me cuesta fingir felicidad entre tanto ruido, consumismo y atolondramiento. Aún a pesar de ello, casi siempre dejan huella; y en ella yo te deseo: Que recibas el abrazo de la paz que nace, cuando ofreces tu mano de amigo sincero. Que recibas la luz de cada nueva estrella, que brilla en los ojos, cuando miran tiernos. Que entre tanto ruido, halles el silencio, que crea canciones, cuando regalas tiempo. Que no te pesen nada, nada los recuerdos, que sean sonrisas cuando miras al cielo, que todo el amor que guardan por dentro, roce tu corazón, con un suave beso. iñaki.
Tal vez sea lo que nos pasa. Que hemos de curtirnos ahora para rebrotar en primavera.
ResponderEliminarMaravilloso poema, Izara. No sé si ha sido producto de la casualidad pero te ha salido con forma de árbol.
Un abrazo fuerte.
Hola Izara.
ResponderEliminarEs un poema precioso. Seguro que esas jaras tan amorosamente cuidadas por tí, van a dar cobijo a grandes sueños a no tardar...
Un abrazote.
Maat
Hermoso poema que decreta el renacer
ResponderEliminarde sueños, de existencia
Un beso grande.
Gizz
Muy hermoso tu poema, Izara, un canto a la esperanza y al renacer de los sueños... pues yo creo que sí, que cuando salga el sol, las jaras rebrotarán verdes, de un verde intenso, preciosas, y seguro cobijarán mil y un sueños.
ResponderEliminarUn besote, de los gordos
Izara-
ResponderEliminarUna delicia leerte y relerte.
Izara me gusta leer los poemas en voz alta, los entiendo mejor...
Esperaremos que tus jaras, crezcan y su sombra nos cobije.
Y nuestros sueños se cumplan.
Muchos besos.
Guau.....! qué blog más maravilloso..simple, sencillo...dulce..cálidas palabras..que me entibiaron el alma. Muchas gracias!!
ResponderEliminarEntré hoy por primera vez, y aquí me quedaré, Izara.
Desde Buenos Aires un cariño para ti, Viviana