El dia que a Abel mataron,
no era festivo.
Pero lo pudo haber sido,
pues antes era jolgorio,
todo el pequeño planeta,
lleno de risas y gritos.
Pero bastó una palabra
para cambiar las estrellas,
y donde brilló la luz,
ahora viven sombras negras.
Abel vino de los prados,
tan solo traía ovejas,
y un concepto de lo propio,
que a Caín, no interesa.
Un pequeño incendio basta,
para acrecentar fantasmas,
que alimenta la pobreza.
El miedo, el egoismo,
y como reina suprema,
tú.. la envidia.. que alimentas,
nuestras almas cicateras.
Caín nunca empuñó quijadas
quizás solo la palabra,
infundada, traicionera
los que empuñaron las armas,
en forma de egoismo,
de envidias y de fronteras,
fueron otros, mas discretos,
igual que despues de siglos,
sigue ocurriendo, en la tierra.
Hay mucho Abel, que perece
por culpa de nuestras guerras,
pero amigo, ahora ya no es Caín
quien limpia, nuestra conciencia
ahora ya somos nosotros,
aquí la culpa, ya es nuestra.
Izara.
no era festivo.
Pero lo pudo haber sido,
pues antes era jolgorio,
todo el pequeño planeta,
lleno de risas y gritos.
Pero bastó una palabra
para cambiar las estrellas,
y donde brilló la luz,
ahora viven sombras negras.
Abel vino de los prados,
tan solo traía ovejas,
y un concepto de lo propio,
que a Caín, no interesa.
Un pequeño incendio basta,
para acrecentar fantasmas,
que alimenta la pobreza.
El miedo, el egoismo,
y como reina suprema,
tú.. la envidia.. que alimentas,
nuestras almas cicateras.
Caín nunca empuñó quijadas
quizás solo la palabra,
infundada, traicionera
los que empuñaron las armas,
en forma de egoismo,
de envidias y de fronteras,
fueron otros, mas discretos,
igual que despues de siglos,
sigue ocurriendo, en la tierra.
Hay mucho Abel, que perece
por culpa de nuestras guerras,
pero amigo, ahora ya no es Caín
quien limpia, nuestra conciencia
ahora ya somos nosotros,
aquí la culpa, ya es nuestra.
Izara.
Muy bella y estoy completamente de acuerdo con el contenido. Un abrazo
ResponderEliminarTodos tenemos un poco tanto de Caín como de Abel. Y la lucha suele ser despiadada.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Izara. Me alegra leerte.
ResponderEliminarEs difícil que alguna vez no se nos cruce el cable y nos de gana de ser Caín. Por fortuna no pasa de un mal pensamiento.
Un abrazo.
Extraordinaria composiciòn del bien y el mal y lo has expuesto y lanzado a nuestra terrible modernidad, muy buen acierto la mùsica!
ResponderEliminarbesos
Hola Izara!!! Felicitaciones por tu blog, la verdad es que cada escrito esta lleno de palabras muy sentidas. Cuando lo leí me sorprendí, ya que en mi cabeza ha estado dando vuelta la idea de escribir sobre Caín y Abel. Quiero plasmar en ese escrito una
ResponderEliminarsituación familiar que vivo en este momento.
De corazón felicitaciones y mil gracias por ser seguidor de mi humilde blog.
Saludos desde Caracas, Venezuela.
Rosmar.