Se van llenando mis montes
de nuevas jaras.
Sin savia, ni alma
¿quizas necesarias?
Tal vez, pero...
mientras veo mover sus aspas,
un escalofrio de inquietud,
me abraza.
A vuestra vera,
no hay abrigo,
la energia que creais
marcha lejos,
como los rios,
pero a diferencia de ellos,
no dejais huella de vida,
en los caminos.
Siniestros árboles sin hojas, con cortezas lisas y absolutamente frías.
ResponderEliminar¿Dónde grabar un corazón?
Un beso grande.
mmm Todo tiene belleza si sabemos encontrarla, pienso, siento y confìo que la naturaleza es sabia...
ResponderEliminarTe dejo mi abrazo
Un horror. Dicen que es el progreso... pero qué sabemos las ardillas de eso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por cierto, tengo ganas de poner una puerta de acceso directo del tronco de mi árbol a tus jaras. Y no es que te esté pidiendo permiso, pero te lo hago saber para que no te sorprenda, cuando la veas.