Hace ya un tiempo

Hace ya un tiempo que prefiero no mimar a las palabras, ya no busco entre los pliegues vanidosos de su voz, el consuelo momentáneo de su danza. Prefiero ser su camino abierto, en el vuelo donde escapan, de la prisión de los sonidos rotos, por el sonido estridente de la nada, prefiero ser el lienzo donde ellas clavan, la flecha que atrás deja un recorrido de dolor; y se hace voz en los labios que sólo vibran en alabanza. iñaki